domingo, 10 de mayo de 2009

Chimeneas


Espero en la puerta de una fábrica
La ruptura furiosa de los obreros
con el orden del patrón, el capataz y el estado.
Espero, espero, espero y nada.
Confortándose:
-No habrán venido a trabajar.
Pero las chimeneas echaban humo y las maquinas funcionaban.

Se canso de tanta espera y curso Sociología.
Pensó teóricamente.
Pronostico la muerte de la clase obrera y
Asesoro a las empresas sobre el comportamiento laboral.
Se lleno de prestigio y dinero.
Espero, espero, espero y nada.

Hasta que un día se dio cuanta de su error.
Llo tomaron de rehén, en una huelga salvaje.
Ahora sí, las chimeneas ya no echaban humo,
pero si los obreros

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